LA MUERTE DEL ZOPILOTE NEGRO

Tras meses de investigación del huey tlatuani prehispánico Nezahualcóyotl, rey poeta de Tetzcoco, y traduciendo la creatividad en el pensamiento del siglo XV, se pudo recrear diferentes cuadros para representar a la tribu de los alcohuanos. Con destreza involuntaria se dieron los hechos en los preensayos de nuestra improvisación temática para el diseño, nunca antes visto y olvidado, de lo que es la historia de las tribus de los mexicas.

Con entrega esmerada y con ímpetu voluntario se dieron cita (una vez más) 7 actores y 10 actrices del Manto Sagrado, agrupación que dirijo con la finalidad de instruir y dar un mensaje de amor y esperanza, así como transmitir y enseñar valores humanos en un aprendizaje real, como fue el acto de ‘sacrificio a Dios’. En aquellos tiempos remotos se hacían sacrificios humanos como ofrenda a los dioses. En la actualidad, donde se ven tantas desgracias en el mundo en una realidad virtual y se van perdiendo los valores humanos en ayuda a los demás, desde nuestro continente americano nos vemos reflejados en un mundo frío, desnaturalizado por el consumo y la competencia irracional, y muy lejos de alcanzar la sabiduría de Dios.

La enseñanza empieza con una entrada triunfal y espectacular de Xiuhtototl (pluma dorada), que con fuego simboliza el recibimiento del gran señor de Tetzcoco y, como si fuera un poema en vivo, una danza prehispánica interpretada por las Xochitlquetzallis, que nos comunica al más allá, al mictlan, al inframundo.

La puesta en escena narra la historia de la guerra ‘la triple alianza’ de los reinos de Tenochtitlán, Tetzcoco y los Tlacopan para derrotar a los tepanecas de Azcapotzalco, y tomar una supuesta venganza en contra de Maxtla, hijo de Tezozomoc (quien mató a Ixtlixochitl, padre de Nezahualcóyotl), gracias a la oportuna intervención de Nezahualpilli (hijo del huey tlatuani y jefe de los ejércitos de los alcohuanos). Los astros y el viento soplaron a su favor y las constelaciones del cielo – como el eclipse lunar – le concedieron el triunfo (videncia hecha por Nahualli, la anciana sabia de la aldea). Así, toman como rehén y prisionero de guerra a Maxtla, quien se hace llamar ‘El zopilote negro’.

En el ir y venir aparece en escena Tlotli, el gran cipactonal (hijo de Nezahualcóyotl con su concubina Citlali), quien será el sucesor de Nahualli y predecirá el triunfo de la guerra. Triunfo que generó una gran fiesta para los dioses, sin saber que toda la tribu se encuentra en el inframundo porque todos estaban ya muertos.

Como sacrificio a los dioses se decide la muerte de Maxtla, que estuvo en las manos de Nezahualcóyotl, pero la voz del Dios Creador se hizo sentir y detuvo el acto con el anuncio que grato era su esfuerzo y su siempre entrega a su divinidad, para que su ira no desgracie a su tribu. Sin embargo, no hubo necesidad porque todos estaban en el Mictlan y, por aquel acto de generosidad, serían elevados al Omeyocan, a la esencia sagrada del mismo Dios. Es decir, pasaron del lado oscuro del inframundo a la luz del cielo prometido. La puesta en escena termina con los aullidos del coyote hambriento ‘Nezahualcóyotl’.

Y para no olvidar nuestras tradiciones en el día de muertos, la familia espiritual del Manto Sagrado se unió con alegría para celebrar a todos nuestros difuntos con comidas y bebidas prehispánicas, como: chilliy de camarón seco, guacamole con pipicha, tamalli, élotl, habas en salsa verde con quelites, etzalli blanco con chilliy poblano, etzalli a la mexicana, pepitas de ayotli y tlacahualtl fritos con chilliy y axoxs, ayocotes con cerdo, chapolines, agua de xoconostle, chokolaatoli, dulce de xacualolli, dulce de camotli, huautli, huey zompantli y huitlatamalli, que fueron nuestras ofrendas al Dios Creador.

IN MEMORIAM
✝ Christiam Juan Ángel Rivoín Los Santos
✝ María de Jesús Lozano Muñoz

20 Comentarios

Tina

23 enero, 2024 a las 11:25

Una vez más nos sorprendió otra maravillosa puesta en escena con gran actuación de todos los actores del manto sagrado felicitaciones a todos

23

Ene

LA MUERTE DEL ZOPILOTE NEGRO

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